Contribuyendo al desarrollo integral de las personas con discapacidad física.
Rehabilitación y Salud Mental Sin duda que el apoyo de los profesionales del área de la salud mental es de gran importancia para un buen desarrollo de todo proceso de rehabilitación
La labor que realizan los psicólogos es un elemento que forma parte de un tratamiento integral que permita la aceptación y superación de la discapacidad.
En el proceso de rehabilitación es necesario el enfrentamiento multidisciplinario, en donde el psicólogo tendrá la misión de preocuparse por el crecimiento personal y social de las personas con discapacidad. Toda persona que sufre una discapacidad sufre cambios emocionales como tristeza, ansiedad e incertidumbre sobre su futuro; por lo tanto, es necesario un apoyo de orden emocional y psicológico.
Frente a una discapacidad, nuestro sentir se ve afectado, provocándonos cambios en nuestra persona. El individuo que sufre una discapacidad vive un DUELO, proceso llamado así, porque uno debe asumir que algo muere dentro de sí, para luego tener la fuerza de seguir a delante. El duelo se constituye de diferentes etapas que se dan en un continuo, pasando desde una primera fase de rebeldía y tristeza hasta llegar a la aceptación y reintegración a su vida normal.
En todo este proceso se presentan cambios muy fuertes, en especial en lo referente a nuestra imagen personal. Ya no somos los mismos y sentimos que no valemos igual que antes. Otro aspecto que cambia es nuestro estado anímico; generalmente se produce una depresión, debido a que no se ven expectativas en el futuro; nos sentimos solos, sin ganas de continuar, con dolor físico y emocional. A partir de estos cambios psicológicos, nuestra forma de relacionarnos cambia, volviéndonos irritables, exigentes y, en ocasiones, hasta agresivos con los demás, ya que no sabemos como sacar la rabia y miedo que se provoca por el cambio en nuestra vida.
Todos estos cambios son transitorios, siempre y cuando se desarrolle la conciencia de que podemos superarnos y que eso sólo depende del esfuerzo personal y del deseo de volver a vivir como antes.
En el ámbito Familiar también se producen cambios. La familia se ve afectada en su dinámica normal. Cuando un integrante de la familia sufre un accidente, se tiende a centrarse en ayudar y no se mide el esfuerzo y la energía que ponemos para superar la situación, lo cual provoca un desgaste al centro del grupo familiar; por lo tanto, se debe tener en cuenta la importancia de desarrollar en el grupo familiar ESTRATEGIAS para manejar los cambios que provoca la discapacidad en la familia y cómo fortalecerse para poder superarlos.
Duelo
¿Qué es el DUELO?
En el proceso de rehabilitación psicológica se dan una serie de procesos internos que son necesarios vivirlos, de modo de superar el problema que les aqueja. Los cambios emocionales que sufren los pacientes con una discapacidad son múltiples, los cuales varían de acuerdo a las características individuales.
En general, todos los procesos psicológicos comienzan con el DUELO, el cual implica una serie de etapas, y el vivirlo adecuadamente marca la diferencia entre una recuperación sana o un estancamiento emocional.
El DUELO NORMAL es un proceso de desprenderse intelectual y emocionalmente de lo que se ha perdido y de reevaluar y reorientar emocionalmente las posibilidades o habilidades que permanecen.
En el duelo patológico, (aquel que no tiene una resolución sana, sino que lo lleva a una enfermedad emocional mayor) no se produce esta separación, sino que sucede precisamente lo contrario, la persona se aferra a lo perdido y recurre a diversas defensas(mecanismos psicológicos) para evitar que la perdida se convierta en algo real.
El período de ajuste que requiere un ser humano para reponerse a la pérdida recibe el nombre de PROCESO DE ELABORACIÓN DEL DUELO y, como todo proceso, evoluciona a través de etapas, las cuales son:
Reacción inicial de Shock:
Corresponde a la respuesta inmediata al conocimiento de una pérdida o muerte. La persona se centra en su cuerpo, en el dolor, todavía no se da cuenta de lo sucedido. Aquí es recomendable ir entregando información de a poco, de manera que comience a entender lo sucedido.
Rechazo:
Aquí la persona no acepta las consecuencias del accidente, actuando como si lo sucedido no fuera verdad; se niega aceptar lo que pasó, mostrándose rebelde, enojandose con su entorno.
Es recomendable darle un espacio para que pueda expresar sus emociones de manera de sentir apoyo, pero debe comenzar a enfrentar la realidad.
Reacción depresiva:
Aquí se cae en un estado de tristeza a causa de darse cuenta que nada volverá a ser igual que antes y que las consecuencias del accidente son irreversibles. Se observan cambios en estado de ánimo, irritabilidad, desmotivación, rabia, soledad, etc.
Aquí el apoyo familiar es trascendental; al paciente se le debe acompañar, escuchar, ya que es un período de mucho dolor, tristeza y soledad.
Adaptación:
Aquí la persona comienza su camino de vuelta, empieza a asumir lo que pasó, acepta su discapacidad y limitaciones y comienza a potenciar todas aquellas capacidades que no fueron afectadas, permitiéndose vivir plenamente de nuevo.
Aquí el paciente comienza a tener más independencia y disfruta de su nuevo proyecto de vida.
La superación del duelo provoca en la persona con discapacidad un gran orgullo, ya que le demuestra su fortaleza interna, debido a que se sobrepuso a mucho dolor, soledad y que, aunque se sintió en ocasiones agotado, igual fue capaz de continuar y lograr sus metas trazadas.
Estrategias
Estrategias para manejar en familia una situación de discapacidad
Recomendaciones en torno al manejo del paciente discapacitado
Si la actitud del cuidador o familiar es percibida como auténtica por el paciente, estaremos en mejores condiciones de ayudar, ya que se logrará un clima de confianza y apoyo.